Fine Line: Entre la vida y la muerte. Por Kiki

Desde niña, mi madre me ha hablado sobre  el amor incondicional que siente una madre hacia sus hijos, sobre el amor incondicional que siente ella hacia nosotros. Siempre lo ha descrito como un sentimiento inefable, inexplicable, incomprensible «cuando tengas hijos lo entenderás», decía ella. Sin embargo, siempre fui una niña curiosa e impaciente a la cual le exasperaba la mera idea de esperar años para llegar a sentir ese amor tan profundo y desinteresado, pero, mágicamente, lo experimenté mucho antes de lo esperado. 

«¿Cómo puedes querer a alguien que ni conoces?». Una pregunta recurrente y aparentemente coherente para la mayoría, mas cada vez que la escucho mi madre aflora en mí. «Cuando lo experimentes lo entenderás» pienso en decir, pero siempre acabo callada con una sonrisa ladina e incómoda, como cuando te dicen «¡qué mayor estás!¡cuánto has crecido!», porque realmente pienso que mi amor hacia Harry es imposible de explicar y quizá de entender. 
Él no sabe ni mi nombre, pero yo sé su tono exacto de voz. Él no sabe ni mi nombre, pero yo sé su grupo sanguíneo. Él no sabe ni mi nombre, pero yo recuerdo los eventos de su vida mejor que los de la mía propia. Él no sabe ni mi nombre, pero, curiosamente, siento que me conoce mejor que nadie.

Durante años, Harry y su música han sonado durante los meses de bullying, los ataques de ansiedad y los episodios depresivos, y, ahora, durante las risas con mi familia, las conversaciones eternas y las miradas de orgullo con mis amigas y los silencios ahora cómodos y no consumidores conmigo misma, siguen sonando.

El pasado viernes (14/07/2023) mis padres me ayudaron a hacer mi mayor sueño realidad, y me llevaron a ver a Harry. La cola fue excesivamente larga, el calor era inhumano, mi cabeza dolía, mi tripa dolía, mis pies dolían, pero, como hace años no ocurría, mi corazón se sintió más sano que nunca . Por fin, al oírle en directo cantar fine line, entendí realmente la palabra «resiliente» con la que tanto tiempo me llevan describiendo,  cuando tuve la realización de haber pasado de escuchar esa canción en mi cuarto anhelando estar muerta, a escucharla en su concierto agradeciendo estar viva. 
Mucha gente puede que me describa como una «fan loca», pero, irónicamente, en parte gracias a ser su fan, estoy más mentalmente estable que nunca, y esa es una de las muchas razones por las que puedo afirmar que: Harry he experimentado por primera vez lo que mi madre describe como amor incondicional.