Russafart con Arístides Rosell
Con carácter de bienal, Russafart regresa. Un camino que cierra ahora, un ciclo de diez años. Edad de madurez para un evento cultural que tuvo la originalidad de abrir las puertas de los estudios de arte al público y que convocó una amplia participación y colaboración social del céntrico barrio de Russafa. Hoy somos un referente para nuevos espacios de arte, dentro y fuera de Valencia y nuestra convocatoria atrae a visitantes y creadores de todo el mundo.
Los días 1, 2 y 3 de junio de 2018 bajo el lema «Creando arte» volvemos a abrir las puertas de los talleres y espacios artísticos. El reencuentro entre público y arte tiene lugar tras dos años de intenso trabajo, tiempo que evidencia que el arte está en constante busqueda creativa y renovación de sus lenguajesy formas de expresión. No exenta de dificultades, marcada por estos duros años de crisis, con amargas experiencias de censura y de recortes en la libertad de expresión a nivel nacional, esta fiesta del arte, permitirá constatar la obra de más de 200 artistas.
Un momento excepcional para descubrir qué se cuece al interior de los talleres, espacios donde se nos revela en toda su dimensión el día a día del arte en sus ámbitos mas íntimos, donde la inspiración y los motivos toman forma definitiva. Los testimonios de quienes han vivido esta experiencia retratan la singularidad de estos encuentros: cada estudio es un mundo, cada artista un misterio.. Y en esta complicidad el arte y la cultura llegan a su climax. Son ya diez años, que se han hecho breves. La creación no ha dejado de germinar.
Los artistas participantes entre pintores, escultores, fotógrafos, videoartistas, artistas urbanos y performers le invitan a participar en esta manifestación creativa distribuidos en 60 estudios artísticos y proyectos, además de 28 espacios expositivos. El conjunto de esta muestra descubre las maneras de hacer, crear y pensar del colectivo de productores de arte que habita en el barrio de Russafa.
En esta edición se reitera el concurso de pintura rápida y contaremos con la participación de cinco artistas de Lisboa, como parte de los intercambios culturales a nivel internacional que hemos venido realizando con eventos similares a Russafart.
Celebramos esta edición de Russafart bajo el signo de “Creando arte” que encuentra su riqueza en prácticas dedicadas al reconocimiento de la cultura como forma de activar la comunicación mutua entre artistas y público. Una ocasión óptima para activar la vertiente cultural y creativa del barrio de Russafa.
Destacamos la valiosa aportación de los comercios del barrio de Russafa que colaboran con el evento, del mismo modo agradecer a todas las personas, entidades y patrocinadores que hacen posible el evento, creando sinergias recíprocas.
La asociación Russafart les invita a participar de esta edición, donde las experiencias creativas de los artistas del barrio de Russafa se fusionan en estos 10 años de incansable actividad artística con un programa de actividades y propuestas, fusionando el carácter lúdico, festivo y de acción creativa que nos identifica.
Les esperamos para disfrutar del arte y del barrio porque Russafart es Russafa y Russafa es Russafart.
Arístides Rosell
Ximo Rochera– Russafart se ha consolidado como un evento independiente dentro del barrio de Ruzafa que, pese a la gentrificación y los cambios del paisaje urbano, continúa celebrándose en Valencia. ¿Alguna vez os habéis planteado agrandar las fronteras o, incluso, cambiar esos lindes, quizá salir del barrio?
Arístides Rosell– Se han ampliado esos límítes de los que hablas. Russafart realiza intercambios con artistas hace tres ediciones (Río de Janeiro, París, Lisboa). Realmente no es que amplíe los lindes, sino que apoya e integra otros barrios como Monteolivete.
X.R.– ¿Os solicitan participar talleres o estudios de fuera de la zona geográfica que define Russafart?
A.R.– Sí, hay muchos talleres que lo hacen. El número de solicitudes ha crecido. Hay artistas que han salido del barrio, pero también se ha dado el proceso inverso: hay otros que han regresado al barrio, como Lucía Peiró.
X.R.– ¿Qué ha cambiado, a tu modo de ver, desde los comienzos hasta hoy?
A.R.– El leit motiv siempre ha sido mantener la esencia de los primeros años. Lo que hacemos no ha cambiado. Cambian los artistas y los espacios, se regeneran, pero es la misma esencia. Reivindicamos la importancia que tiene el sector primario en la producción artística. Sin los talleres no existiría la cadena. Creo que es importante incidir en este punto y darle toda la importancia que se merece.
X.R.– ¿Afectó de alguna forma el cambio político que se produjo en 2015 en Valencia a vuestra forma de trabajar o de pensar?
A.R.– Generó mucha ilusión y expectativas. Grandes augurios por las ganas que había… La velocidad a la que se puede provocar el cambio no ha acompañado. El futuro estaba condicionado por las viejas estructuras, sin embargo, el 21% no ha cambiado. Pese a las ganas seguimos teniendo obstáculos.
X.R.– ¿Cuál es la motivación que te hace continuar?¿Tenemos Russafart para muchos años?
A.R.– La motivación es la cultura. Apuesto por la cultura a pesar de los obstáculos. Actualmente, según las últimas estadísticas publicadas, tenemos un 87% de paro técnico. Eso es una barbaridad. Los artistas tienen que dedicarse a otras cosas. Compaginar profesiones. Ningún gobierno ha tenido en cuenta esta cuestión y la sociedad ha ido incorporando todos estos cambios negativos. Insisto en un mensaje: Sin ese sector primario no existe el arte.